20.11.16

Táboa Redonda: Leonard o detenerse



Leonard o detenerse


"Tengo un amigo que adora a Cohen. Y si ustedes conociesen a mi amigo sabrían que decir eso es mucho decir. Porque mi amigo es alguien muy especial, que ha decidido no hacer demasiadas cosas a la ligera. Y elegir qué le gusta no es una de ellas, sin duda.

Ahora Cohen estará unos días (que cuando salga esta columna ya habrán pasado) en boca de todos. Muchos habremos visto el vídeo de su discurso de aceptación del Príncipe de Asturias, que da una idea de cómo se tomaba -también él- las cosas, su música, su vida, supongo. Y ese pico de atención hará que alguien lo descubra, que es bueno, pero tendrá el indeseado efecto de banalizarlo, al hacerlo una estación más de esta tonta vorágine informativa que nos lleva de consternación en consternación desde Bowie hasta él, pasando por Pedro Sánchez, Dylan y Trump. Y es una pena. Es lo contrario de lo que hace mi amigo, que se para y profundiza. Y creo que es lo contrario de lo que quiso hacer Cohen con su carrera y le valió para llegar a donde no te llevan las ventas.

Que uno de los problemas de internet es el exceso de información, y la consiguiente dificultad para discernir cuál vale y cuál no, es ya un lugar común. Pero otro mal intrínseco al medio, a su inmediatez y a su incesante actualización, es que impide que nada repose, que nada dure, que nada se libre de ser rápidamente reemplazado.

Escribir en línea, por ejemplo, proporciona una respuesta instantánea que es siempre tentadora. Por eso tiene poco que ver, en cuanto a dedicación y persistencia, con escribir con un objetivo a meses o años vista, o sin él. Y no sé si eso nos condena a la superficialidad, pero estoy seguro de que se nota. Que la fugacidad quita peso a lo que escribimos y, por tanto, a lo que leemos.

Necesitamos a los demás. Al menos yo. Y escribir, cantar, pintar, fotografiar o hablar son actos de comunicación de los que esperamos una respuesta. Quien diga que escribe para él mismo y luego no guarde su obra en un cajón, miente. Queremos llegar a los demás, porque queremos que los demás lleguen hasta nosotros. Que nos quieran, y eso. Pero ahora parece habérsenos ido de las manos y es como si, de los elementos de la comunicación, lo de menos fuese el mensaje. Total, para lo que va a durar. Ahora que creemos disfrutar de la libertad de expresión y contamos con herramientas de comunicación asombrosas, ahora que podemos llegar a quien queramos y nos hablamos sin interrupción, apenas decimos nada. En un salto global a peor nos hemos quedado con el canal, con el acto hueco de transmitir y recibir, sin parar, el vacío en sus diversas formas."
* * *

5 comentarios:

  1. Supongo -y espero- que la cosa se reequilibrará según vaya pasando el tiempo.

    El tema, los temas porque realmente hablas de la banalización, pero también de la prisa (y de querer ser aceptados) da para mucho, sobre todo si se quiere profundizar. ;-) Hace no mucho leí una columna-post de Jesús Ferrero en la que decía algo así como que todas las civilizaciones habían luchado por no perder su legado y sin embargo la nuestra estará condenada a conservarlo absolutamente todo.

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  2. El único problema es la prisa, inducida muchas veces.

    un abrazo

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  3. Domingo 20-11-2016 Diario El Progreso de LUGO, núm. 35.518. Dominical Táboa Redonda núm. 58.
    “Leonard-o detenerse”. Tras leer el suelto de su columna, justo es reconocer las bondades del acceso a Internet que nos ofrecen las telefónicas previo pago de una simple factura de unos 50 euros mensuales, que nos facilita un inmenso acceso con alguna pequeña limitación y vigilancia que ejerce la policía y los gobiernos que se dan cuenta de algunas vertientes o peligros, -vídeos, música, moralidad, sexo virtual, infancia, comercio- y que tratan de ceñir y controlar.
    Hacienda trata de controlar, investigar y extender los impuestos al comercio electrónico, que hasta ahora se les escapaba, y que va a dejar de hacerlo, será un inmenso nicho de recaudación, para aumentar ingresos tan necesarios en este tiempo de riesgo o desaparición de las pensiones vitalicias y compatibles de la inmensa clase Política de España, de la cotizante -trabajadora y mendicante- mejor no mencionar.
    Curioso titular de La Voz de Galicia núm. 44.966 del 22 de noviembre 2016 “Hacienda cobró a 70.000 madres gallegas un IRPF que la Justicia cuestiona, El Tribunal Superior de Madrid abre la puerta a reclamar la devolución desde 2012”. Consúltese el reportaje con la ayuda de búsqueda que ofrece el padre Google. Y que de momento es gratuito, pero dejará de serlo, tras los apremios recaudatorios que Hacienda no tardará en anotarle.
    Voy a tener que eliminar de mi ordenador la visión de la Sexta TV en su programa del sábado de 21:00 a 02:00 del domingo, pues es un programa revolucionario, era más tranquilizador el de Tip y Coll que en todos sus programas citaban “…y mañana hablaremos del Gobierno…” algo que nunca hacían.

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  4. No olvide pasar por el BLOG:
    http://www.cosasqmepasan.com/2016/11/el-escritor-minusculo.html
    Y lea los comentarios: “no tienen desperdicio, lea el de NáN… creo que se alegrará de la lectura de este extraordinario BLOG que nunca defrauda...

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  5. Si visita el BLOG:

    https://madredemarte.wordpress.com/2016/11/23/carasucia-2/

    Obtendrá el regalo de la visión de este inolvidable vídeo:

    Un vídeo vale más que 1.000 palabras.
    Time 19:35 de 109.01 MB. Dirección en Vimeo:
    https://player.vimeo.com/video/108810859
    Cara Sucia. Santiago Zannou, 20' de Ralda World.
    Interpretes principales: Mateo es Hugo Mboume, Sally es Vicenta Ndongo, Babukar es Emilio Buale, profesora es Margarita Sánchez. Compañeros de clase Colegio Menéndez Pidal son Arturo Verdú, Alex Santos, Víctor Llucía, Irene Requena y otros indicados en pantalla de visionado.

    https://12-lvl3-pdl.vimeocdn.com/01/1762/4/108810859/296853473.mp4

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